En AGRARIUM, siempre hemos pensado que los datos buenos son seguramente más caros, pero mucho más baratos que no tenerlos o tenerlos malos. Dado el precio de los insumos y el año hidrológico tan complicado, asegurar la rentabilidad de nuestros cultivos debe ser nuestra prioridad. Para ello nuestra propuesta de valor, pasa por estudiar las parcelas obteniendo un mapa. A partir de este mapa analizamos los diferentes tipos de suelo obteniendo un mapa de fertilidad y uno de aplicación. Sencillo y tremendamente rentable.
El ahorro se hace aplicando por zonas, a cada una de ellas según su potencial y su fertilidad.